En 1960 hizo su aparición en las fiestas la Caballería Cristiana, al frente de la cual iba el inolvidable Pedro Guerrero. Fue el año del triunfo de la renovación; a los grupos y cábilas fundadores del 59, les sucedieron varios grupos y cábilas en 1960, uno de ellos fue este aguerrido y medieval grupo de caballería, que durante los años 60 causó la admiración de todos; el Bando Cristiano se sentía orgulloso de él, porque daba espectáculo y brillantez. Pero el paso del tiempo y el fallecimiento de su fundador trajo consigo su desaparición.
En la retina de los que ya peinamos canas, aún conservamos las imágenes de aquella marcial Caballería, soñando muchas veces con la ilusión en verla de nuevo; han sido varios los intentos fallidos para resucitarla, ¡ya habíamos perdido la esperanza!; nos habíamos acostumbrado a su ausencia, y una sola mención de ella nos molestaba a muchos; la presencia de ellos en los desfiles era sinónimo de peligro y estorbo... pero he aquí, que 30 años después, un grupo de jóvenes decide resucitar la Caballería Cristiana.
La idea levanta recelos y temores, pero Gonzalo López-Auguy Torres les dá un voto de confianza y los respalda; el entusiasmo y la concienciación de emular a aquella bizarra caballería de los años 60 hizo el milagro del éxito de estos jóvenes en el desfile del día 4 de 2000, ante varios miles de espectadores. La felicitación del presidente y su junta directiva ha animado a éstos que ya cuentan con nuevas incorporaciones. La idea ha cristalizado. Los boatos millonarios y soporíferos ya no son necesarios, el espectáculo está garantizado con la presencia de estos jóvenes caballeros que dando un salto en el tiempo tienen como meta resucitar el viejo espíritu de la renovación de las fiestas, de orden y de marcialidad.
Estamos pues en el buen camino; que esto sirva de ejemplo, para recuperar el carácter medieval y militar de que hacían gala nuestros desfiles y procesiones, acorde con la rememoración de nuestra historia.
Caballería Cristiana Luis Alonso López y José Alberto López